La Rioja lanza su propia moneda y recibe duras críticas

La Legislatura de La Rioja aprobó la emisión de una cuasimoneda, con la cual planean pagar hasta el 30% de los sueldos de la administración pública provincial. El proyecto fue enviado por el gobernador, Ricardo Quintela, y con la amplia mayoría del oficialismo en la Cámara se aprobó ayer.

La cuasimoneda, denominada oficialmente como "Bono de Cancelación de Deuda (BOCADE)", tiene una emisión prevista hasta 22 mil millones de pesos. El nombre coloquial de esta moneda es "El Chacho", en homenaje al caudillo y militar federal Ángel Vicente Peñaloza. 

El gobernador Quintela, quien se mantiene enfrentado al presidente Milei, envió el proyecto de ley para emitir esta nueva cuasimoneda para "afrontar la crisis producto de la imprevisión de los recursos coparticipables federales" por parte del Gobierno nacional. Estos instrumentos operarán tanto en formato físico como digital y serán canjeables por moneda en curso legal.

Los legisladores que se opusieron a esta medida, de La Libertad Avanza y la UCR, anticiparon que los bonos "no serán aceptados por muchos locales comerciales y los trabajadores que perciban el 30% de sus sueldos, con esta herramienta, se verán perjudicados por la pérdida de su valor". La diputada radical Gabriela Rodríguez, por su parte, expresó que "el valor del bono en otras provincias estará depreciado".

En este sentido, los mandatarios provinciales Alfredo Cornejo, Rogelio Frigerio y Osvaldo Jaldo, la diputada nacional del PRO María Eugenia Vidal y el exdirector del Banco Central, Enrique Szewach, criticaron el proyecto de emisión. En tanto, el vocero presidencial, Manuel Adorni, advirtió que estas cuasimonedas "jamás van a ser rescatadas por el gobierno nacional".

Críticas al gobernador de La Rioja

El gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, sostuvo que "no es sano para la economía que cada uno cree una moneda". "Al problema de depreciación de nuestra moneda que sufren todos los argentinos, agregarle una cuasimoneda no es una buena salida", consideró esta mañana Cornejo en declaraciones a Radio Mitre y agregó que "ya hemos recorrido este camino en la Argentina".

Asimismo, el mandatario mendocino advirtió que "más allá si es delito o no, algo que deberá definir la Justicia, de alguna forma está claramente prohibido por la Constitución".

Seguidamente, Cornejo adujo que detrás de esta iniciativa "hay un poquito de 'fulbito' para la tribuna por parte de Quintela", a quien acusó de tener "incendiada la provincia por falta de pago de salarios" y de estar "tratando de demostrar que el problema no es de él, sino de la Nación".

El gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, descartó "totalmente la emisión de una moneda" y pidió al resto de los gobernadores "acompañar al Gobierno nacional en la decisión que ha tomado". "Flaco favor le haríamos a esta gestión nacional emitiendo una moneda propia", apuntó el mandatario provincial, según se informó.

Por su parte, el gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, afirmó que la provincia “tiene sus finanzas equilibradas” y que “no hace falta implementar los Bonos de cancelación de deuda que emitirá La Rioja”. "La cuasimoneda surge por necesidad, pero perjudica mucho a la gente, ya que la misma sufre un descuento, no se paga ni se contempla el valor nominal que tiene el billete", explicó durante una conferencia de prensa que tuvo lugar en la Casa de Gobierno.

Asimismo, la diputada nacional del PRO, María Eugenia Vidal; opinó que esta decisión de gobierno podría tener "consecuencias legales". Vidal afirmó que la Constitución Nacional "dice que solo el Banco Central puede acuñar moneda", por lo que consideró que "si el gobernador Quintela acuña esa moneda, es inconstitucional".

El Gobierno de la Nación sobre las cuasimonedas de La Rioja

El vocero presidencial, Manuel Adorni, sostuvo que las provincias "tienen la libertad de hacer lo que consideren correcto" con la emisión de cuasimonedas, pero advirtió que "jamás van a ser rescatadas por el gobierno nacional", a diferencia de lo ocurrido luego de la emisión generalizada que hubo en 2001 y 2002.

En referencia a la decisión del gobierno de La Rioja, Adorni relativizó la posibilidad de un "efecto contagio" entre el resto de las provincias, ya que "la gran mayoría entiende algo tan básico que es que no se puede gastar más de lo que se tiene y está ajustando sus cuentas para que eso sea así".

Al preguntársele si existía malestar en el gobierno nacional por la decisión de La Rioja, manifestó que "cada provincia tiene la libertad de hacer lo que considere correcto, y si considera correcto pagar a los empleados públicos con papeles emitidos por la propia provincia, bienvenido sea". "No nos preocupa, son decisiones estrictamente provinciales y jamás van a ser rescatadas por el gobierno nacional", remarcó.